Bálsamo Menstrual Cyclo

Alivia y reconforta con masajes en el vientre y las lumbares, con el Bálsamo Calmante de Cyclo, creado para proporcionar bienestar durante tu ciclo menstrual. Con ingredientes naturales, este bálsamo transforma el autocuidado en un ritual de conexión personal.

Cada mujer merece vivir su ciclo menstrual con fuerza y cuidado. En Cyclo, hemos creado el Bálsamo Calmante para que te conectes contigo misma, transformando el dolor en alivio y el estrés en calma. Con cada aplicación, estás construyendo un espacio para escuchar a tu cuerpo y atenderlo con respeto y amor. Este bálsamo no es solo un producto, es un símbolo de cómo queremos que vivas tu menstruación: con empoderamiento y bienestar.


¿Qué lleva?

Una mezcla potente y sensorial de aceites esenciales y emolientes naturales:

🌸 Aceites vegetales y mantecas
Caprylic/Capric Triglyceride (coco): suaviza e hidrata sin dejar sensación grasa

Aceite de Ricino: relajante y antiinflamatorio

Cera de abejas: protege y calma

Manteca de karité: nutrición profunda para zonas inflamadas

Aceite de semilla de girasol: regenerador, rico en vitamina E

🌼 Aceites esenciales (efecto calmante y analgésico)
Lavanda: calma, alivia cólicos y relaja

Romero: estimula la circulación y relaja los músculos

Eucalipto: reduce inflamación y pesadez

Menta: alivia con frescura inmediata

Clavo: analgésico natural para calambres



No es solo alivio. Es un acto de amor hacia ti.
En Cyclo creemos que el autocuidado no debería ser un lujo, sino un derecho.

¿Y si, sí puedes elegir cuidarte bien durante tu ciclo?
¿Y si el dolor no tiene que ser silencioso?
¿Y si aplicar un bálsamo también puede ser una forma de escucharte?
¿Y si aliviar tu menstruación también puede oler bien, sentirse bien, y ser bueno para ti?


El ritual empieza aquí

El Bálsamo Calmante de Cyclo fue creado para reconfortarte durante los momentos más sensibles de tu ciclo menstrual. Con una fórmula natural, segura y efectiva, transforma el dolor en cuidado y el malestar en una pausa de conexión contigo misma.


No es solo una crema.

Es una caricia, una tregua, una pausa para ti.
Una forma de decirle a tu cuerpo: “Te veo. Te escucho. Estoy contigo.”